Manuales Diagnósticos en Psicología DSM-V

Los manuales de clasificación diagnóstica son una herramienta clave para los profesionales de la salud mental,  a la hora de profundizar en un trastorno resulta ser un complemento fundamental en los diagnósticos; y me refiero a complemento porque no podemos pasar por alto que son insuficientes y carecen de validez por sí solos, no basta con encontrar  coincidencias en los criterios que aparecen en el DSM y los síntomas presentes en el  paciente, sino que son un apoyo que se suma a las entrevistas y a los diferentes tipos de test, desde sus inicios hasta la actualidad se basa en los síntomas observables de los individuos, es así como cada paciente se clasifica en una categoría que ha sido investigada por Psicólogos y Psiquiatras a través de los años y ha generado una base estadística que engloba las similitudes de los individuos clasificados en cada categorías. En definitiva, sirve para localizar síntomas de los trastornos para posteriormente emplear  técnicas que identifiquen las causas y los posibles tratamientos de dichos trastornos.

A diferencia del DSM-4 el DSM-5 presenta un sistema de evaluación no axial enfocándose en dos bloques de información del paciente, en primer lugar esta la información de síndromes clínicos, trastornos de personalidad y enfermedades medicas; y un segundo bloque que contempla los factores contextuales, psicosociales así como el grado de incapacidad producido.

Este manual a sufrido innumerables criticas por parte de la comunidad científica, por la estigmatización y etiquetación de los pacientes, así mismo el modelo propuesto de enfermedad mental deja de lado los factores sociales y psicológicos lo que implica una formulación psicológica estricta y la necesidad de conocer en profundidad la historia de los pacientes para realizar un tratamiento psicológico individualizado.

Los psicólogos como todos los profesionales de la salud están obligados a desempeñar sus funciones bajo un estricto código deontológico de conducta que reglamenta todas las actuaciones en pro del bienestar de los pacientes, un buen psicólogo en el desempeño de su trabajo acepta la responsabilidad  y consecuencias de sus actos, esto incluye las posibles repercusiones por una mala praxis o por un diagnóstico erróneo, este último podría encaminar las terapias a tratamientos erróneos y ha su consiguiente empeoramiento de los síntomas o aparición de trastornos nuevos entrando en un bucle que podría tener consecuencias nefastas para el paciente y para el desempeño de nuestra profesión. Los Manuales Diagnósticos son claves a la hora de clasificar, describir y explicar los diferentes tipos de trastornos psicológicos o Conductas desadaptadas, una buena apropiación de ellos puede dirigir nuestra profesión a hacer diagnósticos adecuados para así plantear una buena estrategia terapéutica.

Bibliografía 

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